Ayer se disputó el encuentro entre el filial del Real Betis y el del Villarreal CF. Los amarillos celebraron haberse llevado los tres puntos, pero se marcharon a casa preocupados por el estado de su guardameta Íker Álvarez. El internacional andorrano sufrió una contusión antes de llegar al descanso. Fue una acción completamente fortuita, ya que el delantero verdiblanco no pudo frenarse a tiempo cuando su rival acomodó el balón entre sus manos. El jugador del Villarreal CF quedó tendido sobre el césped y tuvo que ser atendido por los servicios médicos de uno y otro equipo, que se acercaron hasta su posición para conocer la gravedad del asunto.
tuvo que retirarse del terreno de juego después de chocar de frente con la pierna del delantero bético
Íker tuvo que abandonar el partido en camilla y dejarle su sitio a su compañero, Filip Jörgensen. El club rápidamente lanzó un mensaje a través de Twitter que decía así: «¡Groguets! Todavía no sabemos si nos llevaremos la victoria hoy, pero ya tenemos la mejor noticia del día: Íker se encuentra consciente, estable y en observación tras el fortuito golpe recibido». La cuenta que cubre la actualidad de la cantera bética también aprovechó la ocasión para desearle una pronta recuperación.
Hoy el jugador ha escrito en Twitter desde su domicilio para tranquilizar a los aficionados y agradecer la labor del personal médico del Betis: «Quería agradecer a los servicios médicos del Real Betis por la atención y la preocupación, y también como siempre a los del Villarreal CF por ayudarme y estar a mi lado en todo momento. Me encuentro bien y reposando en casa ya. Gracias a todos, por los mensajes de ánimo.»