El Estadio de La Cerámica se engalanaría más de tres meses después para albergar un partido de fútbol. Ante la atenta mirada de los miles de «aficionados de cartón» que han inundado el templo ‘groguet’, Villarreal CF y RCD Mallorca se batieron el cobre en un poco apasionado choque donde ha terminado imponiéndose el cuadro local por 1-0. Sin embargo, esos aficionados tuvieron que ver fútbol online y no en el campo.
La primera parte se desarrolló de forma pausada, muy plano y con pocas ocasiones destacables. Arrancó bien el Mallorca con su oportunidad más clara de la primera parte, cuando en el minuto 6 Baba realizaba un disparo lejano que se estrelló en el travesaño. Un susto que no amedrantó al cuadro de Javi Calleja, que gozó de un mayor dominio durante la primera media hora de juego. El primer zarpazo al marcador lo protagonizó el Villarreal, que en el minuto 15 ponía el 1-0 tras una acción potente y vertical de Samu Chukwueze por banda derecha. El nigeriano puso un centro para que Bacca solo la tuviera que empujar para avanzar al cuadro castellonense.
Pese a que fueron los locales quienes marcaron el ritmo durante la primera mitad, fue el Mallorca quien protagonizó un mayor número de ocasiones. Cucho, Lago Junior y sobre todo Kubo fueron los protagonistas del cuadro balear en ataque. El japonés gozó de una falta directa desde el costado derecho que parecía envenenarse, pero finalmente salió desviado. Un disparo del Cucho al primer palo y otro del propio delantero colombiano desde fuera del área terminó rebotando en la zaga local y engañando a Sergio Asenjo, pero el balón finalmente fue a córner.
primera parte pausada y con poco ritmo, pero un final de partido de infarto
Tras la reanudación llegaron los diez minutos más interesantes de todo el encuentro, con un ida y vuelta que rompió el ritmo tranquilo y pausado que ha caracterizado todo el encuentro. Primero avisó el Villarreal por mediación de Samu Chukwueze, pero su tiro forzado desde la frontal del área se marchó desviado. Mucho más clara fue la oportunidad de los locales en el 53′. Toques rápidos entre Bacca y Trigueros dejaron al centrocampista en una clara posición de tiro, pero Reina realizó una gran parada para atajar el esférico en dos tiempos.
Tras la marcha de jugadores como Kubo o Cazorla el encuentro perdió los destellos de calidad que protagonizan ambos jugadores. Las necesidades del cuadro balear hicieron que se volcaran en ataque en el último cuarto de hora, más con corazón que con cabeza. Aun así, en el minuto 73 gozarían de una clarísima oportunidad de gol. Trajkovski regateó y se quedó solo en el costado izquierdo del área, puso un gran centro al Cucho y el delantero colombiano la mandó al lateral de la red por muy poco. Más de un aficionado visitante debió cantar gol desde su casa.
El elenco de Vicente Moreno dispuso de otra oportunidad clara en el minuto 85, con el disparo desde la frontal del área del Cucho Hernández que forzó una gran atajada del hasta este momento desaparecido Sergio Asenjo. Apenas un minuto después fue el Villarreal el equipo que tuvo una gran ocasión de gol gracias al disparo lejano de Moi Gómez que tuvo que repeler de gran forma Manolo Reina. Pero la contestación del Mallorca fue clara y directa: Baba, quien se había topado con el larguero en el inicio del choque, volvió a estrellar su disparo al travsaño, pero en esta ocasión con una «folha seca» que dejó boquiabiertos a propios y extraños, ayudado con el toque en Zambo Anguissa.
Con el 90′ cumplido llegó una agónica ocasión en contra del Villarreal, con una jugada en el área pequeña con disparos de chilena, remates a media vuelta y de cabeza, todo ello realizado por el Cucho Hernández y Budimir, pero la suerte le sonrió al cuadro de Calleja y, finalmente, el balón marchó a córner. Una victoria en LaLiga Santander se debe sudar hasta el final, y eso ha hecho el Villarreal. Tres puntos de oro en un partido poco entretenido, pero con un final agónico.