Con dos goles de Borja y Rulo valieron al Hércules para sumar tres puntos de oro en Tarragona ante un Gimnàstic que regresa a zona de descenso. Con este triunfo, el equipo alicantino pone fin a una racha de casi dos meses sin ganar un encuentro. Foto: Gimnástic de Tarragona.

Desde el pasado 27 de octubre no se imponía el Hércules. Fue en Cornellà con un solitario tanto de Jona que entonces valió al conjunto blanquiazul para sacar la cabeza del vagón de cola. Sin embargo, los alicantinos cayeron en depresión a partir de entonces y se hundieron en la tabla.

El partido en Tarragona ante el Gimnàstic, otro teórico aspirante al ascenso metido en problemas como el Hércules. El dramático duelo en el último partido del año se decantó a favor del equipo que entrena Vicente Mir que logra su primer triunfo tras su llegada al banquillo blanquiazul a principios de diciembre..

El Hércules no arrancó bien en el partido por lo que el Gimnástic aprovechó para generar peligro en la primera media hora de juego. Pese a ello, el cuadro blanquiazul mantuvo su portería a cero y en su primera llegada seria al área local Borja consiguió batir a Bernabé en el minuto 36.

Con 0-1 el partido cambió por completo. En los minutos restantes hasta el descanso el Hércules tuvo oportunidades para hacer el segundo ante un rival que acusó el golpe que le propinó su adversario.

En la segunda mitad, el Hércules gestionó su ventaja sin excesivo sufrimiento en diversas fases del choque. Incluso, Moha tuvo un mano a mano con Bernabé para hacer el segundo y acto seguido le fue anulado un gol a Carlos Martínez. Poco después, Moha y Pedro Torres volvieron a perdonar.

En los minutos finales, el Gimnástic buscó el empate a la desesperada. El partido se fue hasta el minuto 98 y en una contra el Hércules sentenció con un gol de Rulo, que acababa de salir al terreno de juego, aprovechando que el meta local Bernabé había subido a rematar un saque de esquina.

El 0-2 no saca al Hércules del descenso porque sigue a cuatro puntos de la permanencia y a tres del play out, pero al menos le permite irse algo aliviado al parón navideño y mirar con un mínimo de esperanza la vuelta de la competición en el inicio de 2020.