Desde el inicio de la historia de Tajonar allá por el año 1982, Osasuna Promesas había disputado sus partidos en hierba natural. Pero la pandemia tiene estas cosas y ha terminado con 38 años de historia de un plumazo.
Las exigencias de La Liga de convertir en un búnker toda la actividad del primer equipo ha obligado al filial a tener que disputar sus encuentros en el césped de hierba artificial. Algo que había ocurrido de forma muy circunstancial hasta el momento.
la pandemia ha obligado a osasuna a dividir tajonar
Osasuna dispone dos campos de hierba natural que suele utilizar el primer equipo para entrenar. Además, la entidad centenaria tiene cinco campos más de hierba artificial, más un campo más reducido, también de natural, para el entrenamiento específico de porteros.
Habitualmente el Promesas jugaba sus partidos en el campo principal de Tajonar, que de hecho con la remodelación del estadio El Sadar, con los asientos sobrantes se habían mejorado dichas gradas para los partidos del filial, el División de Honor y el femenino.
Sin embargo, con las medidas exigidas por La Liga debido a la pandemia, a Osasuna no le ha quedado otra que relegar al Promesas al A2 (Artificial 2) que jugará sus partidos durante toda la temporada en dicho campo.
Una pena para todos los jugadores del Promesas, que habituados a participar en campos de hierba natural tengan que conformarse ahora a jugar sin público y en césped artificial. Cosas de pandemias.