En las últimas semanas el conflicto de Rusia con Ucrania, y en definitiva con Europa y Estados Unidos está siendo protagonistas en los telediarios. Este conflicto político que parece se agrava con el paso de los días también podría tener consecuencias en el fútbol.
La UEFA medita que la final se juegue en Wembley y no en San Petesburgo ante el conflicto entre Rusia y Europa por su ocupación de Ucrania
La final de la Champions League esta temporada está prevista que se dispute en San Petesburgo el próximo 28 de mayo. El organismo del fútbol está preocupado por las tensiones políticas, que pueden finalizar en una guerra de dimensiones muy considerables los próximos meses, y aunque San Petesburgo se encuentra lejos de la zona del conflicto, de la frontera Ucrania – Rusia, el celebrarse una final tan relevante en un país enfrentado a Europa es algo que medita la UEFA.
El diario de deportes y negocios Palco23 adelanta que según sus fuentes la final de la Champions League podría cambiar de sede y disputarse en Londres, la capital de Reino Unido. Wembley sería el escenario que tiene en mente ahora mismo la dirección de la UEFA si el conflicto político y bélico no se resuelve en los próximos meses.

El aspecto que podría complicar esta solución es que uno de los mayores patrocinadores de la actual Champions League es la compañía de gas rusa Gazprom, que no vería con buenos ojos el traslado de esta final a territorio británico.