La temporada del CP Villarrobledo está siendo, a todas luces, una campaña decepcionante. El conjunto del Barranco del Lobo tan solo ha podido sumar un triunfo y dos empates en 13 partidos, habiendo encajado 24 tantos. Un lastre que, unido al cambio de formato en la Segunda División B para esta temporada, ha terminado por sentenciar a un equipo que en la 19/20, cuando se paró la competición, también marchaba colista.
Los números son contundentes. El cuadro albaceteño cuenta en su haber con tan solo cinco puntos, mientras que el equipo que marca los puestos de fase de ascenso a Primera RFEF, el CF Talavera, tiene 18 puntos (al igual que Melilla, Mérida y Extremadura). Con tan solo cinco jornadas por delante, las estadísticas reflejan la cruel realidad. Si el CP Villarrobledo no vence, descenderá de categoría.
si el cp villarrobledo no vence al mérida este fin de semana, descenderá a la cuarta categoría del fútbol español
Pese a que todavía queda margen de maniobra contando las ocho jornadas de la segunda fase, el cambio de formato provoca que, con la entrada de la Segunda B PRO (Primera RFEF), todos los clubes que jueguen la fase de permanencia desciendan desde la tercera hasta la cuarta categoría del fútbol español. Además, en caso de llevarse a cabo esta combinación de resultados, el Villarrobledo se convertiría en el primer equipo en certificar su descenso y, por tanto, participación en la fase de permanencia en Segunda RFEF.
Actualmente, la pugna del Villarrobledo no es la permanencia, sino no descender dos divisiones a la vez. Jugar la próxima temporada en la quinta categoría supondrá un duro revés para los intereses económicos, deportivos e institucionales del club del Barranco del Lobo. Por delante, 39 puntos en juego para eludir la desgracia.
