Los proyectos futbolísticos no solo se sostienen con el dinero de los grandes inversores, sino que crecen y se desarrollan gracias a la implicación de algunos jugadores que se sienten muy identificados con los valores que representan. Es el caso de Álvar Herrero y el DUX Internacional de Madrid, un club con poca historia que está quemando etapas en el fútbol español a la velocidad de la luz. Después de su ascenso a Segunda División B temporadas atrás, el conjunto capitaneado por Alfredo Santaelena consiguió el curso pasado un hito que será aún más valorado con el tiempo: subir a Primera RFEF.
el lateral izquierdo renueva y será nuevamente el capitán del equipo
Y uno de los artífices de esa inolvidable hazaña fue, cómo no, el capitán de la plantilla. Álvar Herrero, que hasta hace un lustro era muy conocido en el fútbol madrileño por su exitosa en el CF Trival Valderas, se ha consagrado como uno de los mejores laterales izquierdos de la categoría. A sus 36 años, el madrileño cuenta con una amplia trayectoria en el fútbol de bronce. Una temporada antes de recalar en el club infinito, Herrero formó parte del Algeciras CF, con el que disputó un total de 24 partidos. Para sorpresa de muchos, una vez terminada su etapa en el conjunto rojiblanco decidió regresar a Tercera División con el DUX, que por aquel entonces todavía no tenía esas siglas en su nombre y no aparentaba ser lo que es hoy en día.
No obstante, las aspiraciones fueron creciendo conforme se fue recuperando la economía del club, que estuvo a punto de no inscribirse en liga después de un tiempo en el alambre. Ello provocó que grandes jugadores se sumasen al proyecto y lograsen una gesta que fue culminada a doble partido contra el Tenerife. De entre todos los jugadores que celebraron en la Isla aquel empate de infarto, solo Álvar Herrero y Moyano siguen. Son los dos únicos jugadores de la actual plantilla que han logrado los dos últimos ascensos, de ahí que sus renovaciones estén a la altura de dos megafichajes. Su importancia en el equipo va más allá de lo futbolístico, son emblemas del Inter.
es el único jugador de la plantilla, junto a moyano, que ha estado presente en los dos últimos ascensos
Aunque si olvidamos por un momento todo lo que representa en el club y nos ceñimos a su rendimiento, comprobaremos que su regularidad en el equipo ha sido digna de elogio. Acumula más de 150 partidos, y sus guarismos dejan entrever lo fundamental que es en acciones a balón parado. Designado como uno de los lanzadores de la plantilla, Herrero ha demostrado en más de una ocasión que un partido puede resolverse por pequeños detalles, como un centro desde la esquina. Sus balones al área son harina de otro costal. Muy pocos en la categoría, al menos que ocupen su misma demarcación, cuentan con un arma tan dañina como la suya. Además, quienes le conocen destacan de él su compañerismo, siempre diferencial en un vestuario que quiere conseguir grandes cosas.
