Siete goles recibió en la última jornada el Tavernes Blanques a manos del Villarreal. Una situación que empeora la salud del paciente que sigue sin dar señales de vida. Su arranque no ha sido el esperado, aunque el calendario tampoco invitaba a que lo fuera. Pese a ser colista, desde el club confían en revertir la situación y lograr ante el Albacete el primer triunfo de la temporada.
Solo suma dos puntos, ha encajado 19 goles y tan solo ha podido celebrar cinco. El Tavernes Blanques que maravilló la temporada pasada de la mano de Álvaro Ortí, está siendo la gran decepción en esta segunda etapa en División de Honor. Aunque en verdad, nada, o casi nada queda de aquel grupo de futbolistas que logró la permanencia en la última jornada. De nada valen las comparaciones.
El grupo que dirige Carlos Llorens arrancó su primer punto en la primera jornada de la temporada ante el ADM Lorquí, sin embargo a partir de ahí el calendario era una empinada cuesta hacia arriba difícil de superar para un grupo de jugadores que no conocía la categoría. Fue derrotado por la mínima ante el CD Roda y goleado a manos de Elche y Levante. Volvió a sonreír cuando sumó un empate ante el Torre Levante y llegaba con la moral alta a Villarreal, donde nada pudo hacer ante el vendaval amarillo que le ‘regaló’ un saco de goles.
Desde el club son conscientes de que el arranque del equipo esta temporada en División de Honor no ha sido bueno, sin embargo no se han planteado en ningún momento la destitución del técnico Carlos Llorens. Y es que además del duro y complicado calendario, el Tavernes ha sufrido varias bajas que han hecho más difícil aún su inicio de Liga. En la primera jornada el portero Juan Ángel Oñate pedía la baja voluntaria y el guardameta Marcos Llobat se lesionaba, con lo que el equipo tuvo que contar con los del Juvenil B mientras se conseguía una nueva incorporación. Esta se ha producido esta semana con el fichaje de Jorge García, portero procedente del Racing de Algemesí y se le ha dado la baja a Álvaro Domínguez que regresa al Don Bosco. También las lesiones de varios futbolistas veteranos como por ejemplo el capitán Alberto Lastella han influido de manera negativa en el progreso del equipo.
El club transmite un mensaje de tranquilidad y confía en que pronto se enderece el camino y el equipo empiece a sumar puntos en las próximas jornadas. El domingo (12 horas) reciben al Albacete, un buen partido para empezar a revertir la situación.