La lucha por el ascenso a División de Honor juvenil no decae. Tres equipos –Castellón, Patacona y Don Bosco– bregan por ocupar la segunda plaza que otorga el billete para la disputa de la máxima competición del fútbol sub-19. Estos equipos se encuentran separados por apenas tres puntos cuando restan seis en juego, y el calendario de cada cuadro puede ser clave para el devenir de la competición.
El Alcoyano aun tiene posibilidades matemáticas, pero son remotas
El Patacona es el mejor posicionado para el ascenso después de superar al Castellón por un sorprendente 1-4 en la pasada jornada y empatar a 55 puntos con los albinegros. Los valencianos se llevan así el ‘gol-average’ tras el empate a cero en la capital de La Plana, aunque todavía tienen que medirse a un Valencia B que lucha por el campeonato y al Inter San José, otro de los huesos duros de roer de Liga Nacional Juvenil.
Por su parte, al Castellón puede salirle cara la derrota del pasado fin de semana. Necesitan que el Patacona se deje algún punto y ellos sumarlos todos para poder ocupar la plaza que otorgue el billete para División de Honor. Su calendario en las dos últimas jornadas tampoco es fácil, puesto que primeros se mide al tercer clasificado, el Villarreal B; mientras que concluirá la campaña recibiendo al Levante B, sexto clasificado.
El Don Bosco cayó ante el Hércules por 2-0 y se complica su ascenso
Duro varapalo para las aspiraciones del Don Bosco de militar en División de Honor la próxima temporada, puesto que en la complicada visita al Hércules cayeron por un 2-0 que les deja a tres puntos del ascenso, aunque podría haber sido peor si el Castellón hubiera vencido al Patacona, ya que carecería de opciones matemáticas. Aun así, los de Salesianos buscarán un pleno de puntos ante Elche B y Alcoyano para seguir soñando.
Por tanto, se avecinan dos últimas jornadas de infarto donde una gran cantidad de equipos todavía están disputando sus objetivos, por lo que la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha decidido unificar los horarios de ambas jornadas para acrecentar una emoción que rebosa a raudales.