Hace concretamente 6 días desde que llegó ese delantero al que todo el racinguismo esperaba para marcar la diferencia. En apenas 4 días entrenando en la dinámica del equipo, Cedric, ha mostrado el buen ritmo competitivo con el que ha aterrizado en Santander, pese a llevar inactivo más de 10 meses, desde diciembre del año pasado.
El futbolista nigeriano ha demostrado en las pocas sesiones de entrenamiento que lleva las ganas locas que tiene por jugar
No obstante, al atacante no le preocupa la forma física, ya que, como admite, “ Tengo aún tiempo, pero la cogeré temprano, porque los entrenamientos son muy exigentes y muy duros, lo que me va a venir muy bien”. Lo más importante para el nigeriano, tal y como lo dice él mismo “Es el bien del equipo. Si ganamos con un gol de un defensa central, me volveré igual de loco que si hubiera marcado yo”
En referencia a su estilo de juego, es muy distinto al resto de delanteros que hay actualmente en la plantilla del Racing. Por lo menos, que Jon Ander y que Javi Siverio, ya que, Adrián Balboa, aún no ha aterrizado en Santander. Él se define a sí mismo como “Un delantero al que le gusta bajar a recibir, entrar en contacto con el juego del equipo, pero no por ello dejar de ser un ‘nueve’”.
La importancia de Álvaro Bustos
El gijonés, con el que guarda una estrecha relación desde que ambos coincidieran en el Real Mallorca durante la temporada 2017/2018, ha sido un pilar fundamental a la hora de elegir el equipo verdiblanco como destino, y no el Recreativo de Huelva, equipo que pugnó por el atacante nigeriano hasta última hora. “Álvaro Bustos siempre me dijo que viniera con él a Santander. Todo lo que me contó sobre este club se quedaba corto”
