Hay relaciones que duran poco. Y luego ya está la de Lars Gerson y el Racing. Posiblemente el peor, o uno de los peores fichajes del club en su historia. La situación que provocó el refuerzo del luxemburgués ya pronosticaba un mal resultado. El último día, a última hora se dio la baja de la peor forma posible a Jordi Figueras. En teoría porque no era un jugador que encajaba en la forma de jugar de Solabarrieta. Para suplirle incorporaron una semana después al ‘vikingo’.
Solo cuatro partidos en el Racing
Desde el primer momento no se vio la contundencia que se esperaba de este futbolista. Lars es internacional con Luxemburgo, una selección que pelea por entrar en la Eurocopa de este verano, y además llegaba procedente de equipos punteros de Suecia. Prometía. Pero se quedó ahí, en prometer. Solo se ha vestido de corto en cuatro ocasiones. Apenas 190 minutos como verdiblanco.
Pero esta noticia no pilla de sorpresa a casi nadie. El propio Gerson concedió hace unos días una entrevista a un medio sueco. En esa charla con el periodista dijo que no continuaría en el Racing. Hay que recordar que se le fichó hasta el 30 de junio. También comentó que su bajo rendimiento se debía a su tardía llegada. Aterrizó en Santander en febrero, con la liga a medias y un ritmo de competición alto al que él no estaba acostumbrado.
En el último partido en casa de los verdiblancos no entró en la convocatoria. Cosa que hacía presagiar un desenlace así, aunque quizás no tan precipitado. El club se quita con prontitud una ficha del medio, y desde hace varias semanas ya piensa en la próxima campaña.
