No suele ocurrir muy a menudo que, en el fútbol regional, dos hermanos se vean las caras frente a frente defendiendo diferentes colores. Precisamente esto, les ocurre desde esta temporada a los hermanos Osca Rangel, quien esta tarde se enfrentarán por segunda vez en su vida en un partido en el que uno de ellos se juega mucho con su equipo. Jose y Fran son rivales sobre el verde pero saben dejar los problemas y las «batallitas» del partido en el terreno de juego.
Pese a ser los dos de Alginet, Jose vive su primera temporada defendiendo los colores de la UE L’Alcúdia, con la que tiene muchas papeletas de clasificarse para el play-off de ascenso a Tercera División. Por eso, este partido es, además de especial para el central, vital para el conjunto de Esteban Cana en esta recta final. «Afronto el partido con mucha ilusión, sabemos dónde estamos y lo que nos ha costado llegar hasta aquí. Quedan 5 partidos y los vamos a afrontar todos como si fuesen finales, y la UD Alginet es la primera de ellas», asegura convencido el mayor de los Osca.
Jose y Fran osca, central y delantero, se verán las caras esta tarde como rivales
Precisamente José Osca está viviendo doble ración de emociones esta temporada. La primera, al ser la primera vez que se enfrenta a la UD Alginet, donde guarda grandes amigos como Caseta, recientemente lesionado. «Quería aprovechar para dar fuerzas a mi excompañero y amigo Alejandro Ferreros (Caseta), que se lesionó de los ligamentos de la rodilla y lo operan dentro de poco». La segunda, -y casi de sorpresa-, hacerlo con su hermano en el equipo. Y es que, Fran Osca, diez años menor que su hermano, es juvenil pero ha tenido que ayudar al primer equipo en esta temporada con un calendario tan exigente en Preferente. «No lo esperaba, él es juvenil de primer año y ya está jugando algún partido en el primer equipo, pero se lo merece, tiene mucha ilusión y ganas de jugar, para mí es un orgullo. Enfrentarme a la UD Alginet ya es algo extraño, pues ha sido mi equipo durante los últimos 3 años, pero enfrentarme a mi hermano pequeño es aún más extraño, nos llevamos 10 años y en el partido que jugamos incluso me dio un poco de respeto entrarle fuerte como hago de normal», comenta Jose.
El pequeño de los Osca ha empezado casi por sorpresa su andadura en Preferente pero todo indica que ha llegado para quedarse. En menos de mes y medio se ve las caras con su hermano de nuevo con las ganas de volver a marcarle como ya hizo en el encuentro anterior pese a la derrota del equipo. Fran, muy maduro a pesar de su juventud, parece haber encajado muy bien en el equipo y en los planes de Carlos Romeu. «La verdad que ni yo me esperaba estos resultados, estoy muy cómodo con el equipo y con el ambiente que hay, además desde el minuto uno me han hecho sentir como uno más. En estos momentos soy muy feliz, estoy viviendo un momento muy bonito», explica.
Entre estos dos hermanos, la rivalidad solo se siente sobre el verde y es que, en el día a día, se llevan muy bien pese a la diferencia de edad. El poder vivir este momento tan emocionante en el fútbol es algo que se llevarán siempre para el recuerdo los dos. «Para mí es un sueño cumplido, poder jugar contra el hermano que idolatras, que has visto jugar durante tanto tiempo… Es el mejor momento de mi vida futbolística, en cuanto al juego, es muy extraño porque encima estamos muy cerca en el campo ya que el es central y yo delantero y las disputas son diferentes porque es mi hermano y es muy difícil entrar con la misma fuerza con la que entraría a otro jugador, nosotros solemos hablar del partido una vez terminado y comentamos jugadas concretas, durante la semana nuestros padres hacen bromas sobre el partido, no se posicionan a favor de ninguno de los dos, es gracioso escucharles hablar sobre los dos equipos.», explica Francesc.
Los consejos también son una parte importante de su relación. Jose, el mayor de ellos, asegura que Francesc «es bastante maduro para su edad y sabe dónde está, es muy joven y simplemente que con esfuerzo y paciencia todo lo bonito del fútbol le llegará seguro», comenta. Por su parte, el delantero asegura que algún que otro consejo sí que ha pedido a su hermano mayor. «Al principio tenía muchas dudas y no sabía qué tal saldría todo, él me dijo que trabajase y entrenase bien y los resultados vendrían solos», dice Fran.
Lo que sí tienen muy claro ambos, es aquello que destacan del otro como futbolista ya que además, por su posición en el campo, sus choques son más habituales. «Fran nos marcó el gol del 2-1 en el último minuto del partido, es el único gol que me han marcado en mi vida que no me disgustó. Destacaría de él su ilusión y su esfuerzo, va a pelarlas todas y va a poner la cabeza donde otros la quitan, además tiene buena visión de juego y sabe mover bien el balón», argumenta. También el delantero se deshace en elogios hacia el central del que destacad «su dedicación, su esfuerzo, su constancia y su sacrificio, para él el futbol es algo más que un deporte, jamás ha fallado a un entrene, siempre juega al 100% y físicamente es muy fuerte, lo que le hace un central a tener en cuenta. Estoy muy orgulloso de él».
En cuanto al desenlace del partido, ambos opinan lo mismo, quieren ganar sea cual sea el resultado. ¿Hacia quién de inclinará la balanza?
