Imanol Echeverría (Arróniz, 9 de diciembre de 1994) juega como delantero en la SD Logroñés y afronta una nueva temporada con ganas de seguir marcando goles. Se le cayeron de los bolsillos en Tercera y espera hacer lo propio en Segunda División B. En el fútbol, las miradas siempre recaen en primer lugar sobre los porteros y los delanteros. Como ariete, el navarro tiene esa responsabilidad. Pero su labor va mucho más allá: es un jugador de equipo.
Un bloque que sufrió ocho positivos por coronavirus y que ha solicitado a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) el aplazamiento de su debut liguero, la visita al CD Ebro. La respuesta positiva parece el camino más razonable, visto que el club no tiene suficientes futbolistas como para afrontar el encuentro con garantías.
UN DELANTERO CON LA CABEZA AMUEBLADA
P. – ¿Cómo habéis vivido estas últimas semanas, con confinamiento y brote de la pandemia incluidos?
R. – Ya hemos entrenado, el martes volvimos. El club ha solicitado el aplazamiento del encuentro, pero desconozco la normativa, es cambiante. No sé cuál es el criterio para que se pueda jugar, y estamos a la espera de lo que diga la Federación. La verdad que ha sido un poco difícil, un poco raro; cuando parece que empieza la liga va y nos viene esto. Es una pequeña desgracia, pero todos estamos bien. Lo vivimos con un poco de nervios, a ver como evolucionaban y si se pasaban los contagios. Ya hemos pasado el temporal y esperamos volver pronto a la normalidad absoluta.

P. – ¿Cómo afecta este parón en lo competitivo?
R. – Sí que es cierto que no es bueno parar tantos días para el equipo y más cuando se acerque la competición; nos ha cortado el ritmo de entrenamientos que teníamos, porque tampoco pudimos jugar un amistoso. Puede que sí nos pueda afectar, pero en los entrenamientos nos hemos visto bien y con ganas. Pensábamos que íbamos a estar peor de lo que estábamos, pero será inevitable que se note después de diez días parados.
P. – ¿Os sentís seguros ante el coronavirus o reclamaríais más medidas para luchar contra la pandemia?
R. – Sí, es una situación que tenemos que aprender a convivir con ella, nos va a tocar a todos los clubes. No tenemos las mismas medidas o facilidades que los equipos profesionales, porque tienen mucho dinero. El protocolo se irá mejorando poco a poco, esto es nuevo para todos y es difícil volver a tantos equipos a jugar, con niños, un montón de gente. No sé como está el tema de las ayudas para tests, pero se está haciendo todo lo posible.
P. – Vayamos ya a lo deportivo… ¿Qué valoración hacéis de vuestro grupo de Segunda B? Desde fuera, se intuye muy igualado; pero sin súper equipos…
R. – La Segunda B es una categoría que te exige un poco bastante más, sí que es cierto que hay mucha diferencia entre unos equipos y otros. Unos ‘cocos’ manejan mucho presupuesto y dinero; comparado con otros equipos humildes como el nuestro. El grupo que nos ha tocado es bastante igual a lo que somos nosotros, podemos competir con el resto de equipos que nos ha tocado. Partiendo de esa base, veremos lo que nos vaya indicando la competición; no nos tenemos que poner ninguna meta.
P. – ¿Alguna promesa u objetivo numérico en cuanto a goles?
– Prefiero no mojarme, cuando se dice una cosa puede pasar lo contrario. Lo principal es ayudar al equipo, que como grupo hagamos una gran temporada y todo lo que pueda venir individualmente es de agradecer.
P. – Dieciocho jornadas de competición, tres posibles desenlaces en la primera fase y cuatro categorías posibles a final de temporada (Segunda, Primera RFEF, Segunda RFEF o Tercera RFEF). ¿Cómo se gestiona psicológicamente?
R. – Sí, la mentalidad tiene que ser el punto de partida. Dependiendo donde quedes, puedes acabar en la Pro, Segunda B, Tercera… Hay que estar preparados, empezar bien la liga es clave y muy importante, porque es bastante corta. A partir de ahí, tenemos que intentar competir al máximo.
P. – Renovaciones de los pilares importantes, fichajes ilusionantes y pretemporada con buenos resultados. ¿Las sensaciones, pese al coronavirus, deben ser buenas, verdad?
R. – En principio, sí que somos varios los que hemos renovado del año pasado, parte del bloque se han mantenido; pero es cierto que nos han venido incorporaciones que nos van a aportar experiencia, saber estar en la categoría y poso al equipo. Nos costó un poco más por el tema de conocernos y eso, pero creo que nos compenetraremos muy bien y podremos competir con cualquiera. Por la mala suerte del COVID solo hemos jugado dos amistosos, los dos los hemos podido ganar. Marcando goles y con buenas sensaciones, es la base que tenemos que tener para hacer una buena temporada.