El encuentro que tiene por disputar el Izarra el próximo domingo ante el Ejea es una final. Los resultados en las cuatro primeras jornadas no han sido buenos y está anclado en el fondo de la tabla. Con buenas sensaciones en los partidos como locales, no ha terminado de encontrar ese buen juego lejos de Merkatondoa.
Por ello, se antoja vital e imprescindible la victoria el próximo domingo. Además, el rival llega dolido después de la derrota en casa contundente por 0-3 ante la Mutilvera y la destitución del técnico, Jaime Molina y la llegada al banquillo de un ilustre, Javi Moreno.
Los de Pablo Álvarez, uno de los entrenadores más jóvenes de la competición, quieren volver a dejar una buena sensación como locales pero refrendarla con puntos. El Ejea es penúltimo con dos puntos pero es que la situación albiazul no es mejor, es colista con uno.
Acostumbrado a remontadas
Sin embargo, en Estella están muy tranquilos ya que en otras temporadas el equipo ha comenzado titubeante y después ha evolucionado para terminar salvándose en mucha de las ocasiones con holgura.
Es muy pronto para catalogar lo del domingo como una final aunque se le parezca, tanto por la situación clasificatoria como porque es el rival que justo antecede a los de la Ciudad del Ega en la tabla. Pese a las urgencias, pase lo que pase el domingo, en el Izarra están convencidos de revertir esta situación que ya conocen de sobra.
