La directiva del Haro Deportivo quiere solucionar la situación de impagos que sufren tanto la plantilla como el cuerpo técnico de la entidad. Así lo ha hecho saber en un comunicado difundido este viernes, donde pide también el apoyo y la unión en torno al equipo, que se juega las habichuelas en este final de temporada tan complicado. La permanencia en Segunda B está en juego, nada más y nada menos.
Todo viene en respuesta a la denuncia pública que la plantilla del equipo realizó en el sindicato AFE (Asociación de Futbolistas Españoles). En dicho portal, reivindicaron que la plantilla cumpliría en marzo su tercer mes sin cobrar, mientras que el cuerpo técnico sufre rémoras de entre tres y cuatro meses, con respecto a su salario. En pleno confinamiento con once positivos por coronavirus, todos los males se acumulan para los blanquinegros, que se juegan su situación deportiva.
UN HORIZONTE CONVULSO
Los riojalteños se enfrentan a la SD Logroñés el próximo 31 de marzo, en un encuentro vital en sus aspiraciones de quedarse en la Segunda RFEF (cuarto nivel nacional a partir de la próxima temporada). Con 12 puntos, los jarreros son colistas en el Grupo II-Subgrupo B y esperan despedirse de la primera fase con una victoria que eleve sus opciones de permanencia.
El asunto está difícil y ahora mismo, los equipos que jugarían la fase de permanencia quedarían así, de mayor a menor puntuación, a la espera de aplicar el coeficiente: Club Portugalete (22), SD Tarazona (21), CD Alavés B (20), SD Ejea (18), CD Izarra (15), Barakaldo CF (14), Club Haro Deportivo (12) y SD Leioa (10). De ellos, los cinco últimos y el tercero con peor coeficiente bajarían a la futura Tercera RFEF (quinto nivel).
