Jornada 4.- Villarreal B, 0; UD Llagostera, 0.
Antes de comenzar el partido, el Villarreal B era consciente de que una victoria le devolvía el liderato en solitario del grupo tras el triunfo matinal del Mallorca. El rival, la UD Llagostera, era, a priori,el rival propicio, situado en la zona baja de la tabla con apenas una victoria y dos derrotas como bagaje de su inicio liguero. Sin embargo no tuvo el acierto suficiente para abrir el marcador y terminó empatando a cero.
La UD Llagostera planteó un partido rocoso, defensivo, con un sistema de 1-4-1-4-1, jugando permanentemente con 9 unidades de campo por detrás de la pelota, con constantes pérdidas de tiempo consentidas por el árbitro, ante un filial amarillo que colocó sobre el tapete de la ciudad deportiva un clásico 1-4-4-2. Desde el inicio, la salida del balón por parte de los pupilos de Javier Calleja, era parsimoniosa. No había prisa. Todo era cuestión de velocidad y precisión. Velocidad en la circulación del balón para impedir las constantes basculaciones y ayudas defensivas del cuadro catalán y precisión para filtrar algún balón determinante. Así, el primer cuarto de hora nos dejó un remate de cabeza de Dalmau que atajó sin grandes complicaciones Marcos y una chilena de Acosta que envió el balón fuera. Iba entonándose el Villarreal B. Cristian lo intentó desde la larga distancia sin fortuna hasta que en el 18, una gran pared entre Dalmau y Raba dejó sólo ante el portero al zurdo centrocampista que golpeó con calidad, buscando la base del poste más lejano, pero si fuerza. El portero visitanta atrapó un balón con marchamo de gol. Aquí comenzaron a emerger los laterales amarillos: Miguelón y Franquesa hacían ancho el campo, pero ni por esas. Roger se volvió a encontrar con el guardamenta visitante en un balón perdido dentro del área tras un córner. Ramiro chutaba y chutaba desde lejos sin precisión, y el equipo de Calleja iba alejándose cada vez más de sus propósitos iniciales. Del ataque del Llagostera, apenas una jugada a balón parado en las postrimerías de esta primera parte que concluyó en corner. Muy poco. Era imprescindible la reflexión del descanso.
Sin embargo fue el conjunto catalán quien mejor encaró este segundo acto. Un primer aviso de Carbó fue el preludio de la única ocasión clara de gol del equipo visitante. El propio Marc Carbó encaró a Marcos que dejó su sello en el partido con una parada imponente. A partir de aquí el filial volvió a retomar el plan inicial. Control aplastante pero sin claras opciones de hacer diana. La UD Llagostera cada vez estaba más retrasado, pero el gol no llegaba para desesperación de jugadores y público. Además los cambios de Calleja ni hacían efecto en el juego amarillo. El sopor se hizo dueño del partido. De aquella idea inicial no quedaba nada. Ni velocidad ni precisión. Apenas la entrega innegable de los jugadores y pelotazos a diestro y siniestro. Jugadores catalanes por el suelo cada minuto, interrupciones permanentes. De fútbol, ni rastro. Hasta el descuento. Aquí pudo ganar el Villarreal B. Primero Dalmau con un cabezazo, después Raba con un lanzamiento desde la frontal, ambos desviados, y en la última jugada Miguelón tuvo, probablemente, la ocasión más clara del partido pero el balón se le escapó a centímetros del marco del Llagostera.
Empate sin goles que hace que el Villarreal B ceda el liderato, eso sí, por diferencia de goles, ya que los equipos se encuentran igualados con diez puntos en lo alto de la clasificación.
Ficha técnica:
Villarreal B: Diego, Miguelón, Franquesa (Quintilla m.70), Roger, Juan Ibiza, Ramiro, Cristian (Simón m.57), Imanol, Dalmau, Raba y Franco Acosta (Morlanes m.79).
Llagostera: Marcos, Javi Chica, Maynau, Lucas Viale, Esteban, Pol Gómez, Chele, Pitu (Oriol Ayala m.65), Toni Gabarre (Manu Gavilán m.73), Marc Carbó (Maymí m.81) y Moha.
Árbitro: Iván González del colegio balear. Amonestó a los locales Cristian, Dalmau y Raba y a los visitantes Marcos, Javi Chica, Chele, Pitu, Toni Gabarre y Ayala.
Incidencias: Partido correspondiente a la cuarta jornada del grupo tercero de segunda división B disputado en el miniestadio de la Ciudad deportiva del Villarreal ante un millar de espectadores en tarde muy agradable, algo ventosa, y terreno de juego en inmejorables condiciones.
