Ayer se reunieron en San Sebastián los altos cargos del fútbol modesto junto con representantes de muchos equipos de Segunda B y Tercera, en la que se aceptaron, a falta de que la RFEF los acepte o los deniegue, varios cambios en las citadas categorías que han generado controversia e infinidad de debates en las Redes Sociales.
Los cambios empezarían con la inclusión de dos nuevas categorías, que separarían tanto la Segunda B como la Tercera en Serie 1 y Serie 2. En la primera jugarían los primeros clasificados de cada grupo de Serie 2 y los descendidos de Segunda A, mientras que en la Serie 2 serían 3 grupos repartidos por cierta proximidad geográfica, aunque evidentemente habría desplazamientos más largos de los que hay actualmente.
En Tercera división la separación sería parecida, los primeros clasificados pasarían a disputar la Serie 1 junto a los descendidos de Segunda B, en la que habría 6 grupos, mientras que la Serie 2 estaría compuesta por unos 18 grupos que seguirían más o menos los patrones actuales de autonomía.
No ha sido poco el debate generado entre clubes y sobre todo aficionados contrarios a la implantación de dicha reforma por motivos económicos, pues afirman que: «Sería inviable para un equipo de Navarra, por ejemplo, de Tercera División, viajar todas las semanas a Cataluña a jugar» y aquellas que piensan que puede «ganar en competitividad y hacer las categorías más atractivas». Y tu, ¿qué opinas?.
