El Espanyol B era el único equipo de la competición que no había perdido en casa. Esta tarde ha caído ante un Ontinyent efectivo y entregado a la causa en el primer partido de la era Parras. Las ocasiones y el dominio fue claramente local pero el único gol cayó del lado valenciano.

Los valencianos renunciaron a la posesión del balón hasta el punto de que en la segunda mitad llegó ha haber una estadística abrumadora de 92% a 8% en cuanto a la posesión. De poco les sirvió a los de Barcelona que sucumbieron y se desesperaron, sobre todo tras el gol ante una muralla defensiva inexpugnable.

El partido empezó como se podía presumir, el filial ejerció el dominio, con un juego fluido, dinámico y combinativo. No tardó en acumular buenas ocasiones ante la meta de un, como casi siempre, muy seguro Craviotto. Primero un remate de Moha de cabeza y posteriormente otro de Bermejo y después otra de Ferrán, todo eso en los primeros 16 minutos. Con el paso de los minutos los visitantes crecieron en orden defensivo pero sin apenas presencia ofensiva debido en gran parte a las numerosas bajas que acumulaba en zona de vanguardia. A cuentagotas aparecían los ontinyentins en ataque pero lo hicieron con peligro, una internada de Carbonell acabó con un buen centro a punto de ser rematado por Juanan.

En la segunda mitad el panorama no cambió en exceso. El Ontinyent siguió bien pertrechado atrás y Craviotto inmenso. Bermejo la tuvo y el cancerbero la salvó. Y llegó el gol. Recuperación defensiva y rápido balón al espacio de Soler que prácticamente desde su campo arranca, controla, avanza y al llegar al área define perfectamente. Lo más difícil estaba hecho. A partir de ese momento el conjunto forastero pasó a jugar con defensa de cinco y el Espanyol se mostró incapaz de superar la muralla valenciana. Solo tuvieron una ocasión de gol, eso sí, clarísima. Bermejo se quedó solo ante Craviotto pero mandó fuera. El segundo tiro a puerta del Ontinyent ya fue en tiempo de descuento y pudo ser el 0-2, Carbonell se plantó con ventaja pero su lanzamiento, centrado, murió en manos del meta rival.

Importantísimo triunfo del Ontinyent que rompe la tendencia negativa de las últimas semanas que conllevó la destitución de Mullor. Se vuelve a acercar el equipo de la Vall a la zona de privilegio en la tabla.