Para poder volver a jugar al fútbol cada jugador tendrá que someterse a un test para saber si está contagiado o no por coronavirus. En el fútbol profesional LaLiga ha comunicado a los 42 clubes de Primera y Segunda que habrán test masivos seguramente el martes y jueves de la semana que viene. Pero, ¿y si finalmente se disputa el play-off de ascenso a Segunda y Segunda B?
De igual forma, para que cualquier competición se reanude, los jugadores de los equipos de Segunda B y Tercera participantes en un hipotético play-off de ascenso exprés, tendrán que realizarse el test. Un test que tiene un alto precio. Según publica hoy el diario La Verdad, el coste por club ascendería a 80.000 euros.
Hay que recordar que LaLiga compró 3.000 test incluso antes de que hubieran suficientes para los sanitarios. El problema económico sería para los equipos más humildes del fútbol no profesional. En LaLiga quieren seguir un protocolo de realizar test cada tres días.
Los números
Si cada test cuesta entre 150 y 165 euros y cada club tiene una media de 35 personas para someterse a las pruebas y, durante unas seis semanas, el precio se dispara a 80.000 euros por club.
Los clubes de Segunda B y Tercera esperan que sea la RFEF quien pague los test, que tendrían un coste total de alrededor del millón de euros
Claro está que ningún equipo de estas categorías está dispuesto a asumir el elevado coste de los test, más que nada porque no puede. ¿Quién pagaría los test? El montante total de la operación estaría alrededor del millón de euros que podría pagar la Real Federación Española de Fútbol. El problema vendría si un jugador da positivo. ¿Qué pasaría entonces? ¿Se volvería a parar el play-off? ¿Se aislaría a todo un equipo o solo a un jugador?
Los futbolistas no tienen clara su vuelta. No quieren arriesgar su salud ni la de su familia. Además, el propio jefe médico de la FIFA ha manifestado públicamente que lo mejor sería que el fútbol no regresara al menos hasta septiembre.
Que suban los primeros de grupo
Si finalmente no es viable jugar un play-off de ascenso y las autoridades sanitarias creen que el fútbol no profesional debe suspenderse, serían los primeros de grupo los que ascenderían directamente y no habría descensos. Todo esto debería contar con el respaldo jurídico del Consejo Superior de Deportes a través de un Real Decreto.
