Para que hayan noticias Valencia CF es importante entender este artículo. Los jugadores han regresado a los entrenamientos tras haber vivido, como el resto, del mundo una situación que ha cambiado sus vidas y que ha provocado una rebaja salarial de sus fichas que contando con poder acabar la Liga, será del 9% de lo firmado por contrato.
El club se vio en la obligación de negociar una rebaja salarial con todos sus futbolistas debido a la pandemia mundial del COVID-19 y la bajada de ingresos que iba a sufrir durante los meses del confinamiento en España, y por supuesto también en los posteriores en los que se debe ir recuperando la normalidad en el mundo. Ya aquellas negociaciones fueron duras porque los jugadores también pusieron sus condiciones para rebajarse los salarios y hubo varios jugadores que hasta el final no querían hacerlo.
La mediación de Celades en aquella negociación entre presidente y jugadores fue clave para que finalmente todo el grupo aceptara, y no fue Garay como se ha dicho en los últimos días el jugador que más trabas puso a la rebaja de los salarios.
Ahora bien, los futbolistas saben a ciencia cierta que en las próximas once jornadas se juegan que el club pueda tener un proyecto u otro bien diferente el próximo curso o los próximos cursos. El Valencia CF está obligado a jugar la próxima edición de la Champions League para mantener una plantilla parecida en cantidad y calidad de los salarios. Porque pese a que el club no supera la barrera de los 3 millones netos por campaña, salarios de Parejo, Kondogbia y Rodrigo, si tiene ya a muchos jugadores por encima de los dos millones netos y eso provoca que sea una plantilla por encima de los 100 millones en fichas y eso es algo que el club de Mestalla únicamente puede soportar con los ingresos de la Champions League.
En circunstancias normales el Valencia CF sin Champions League tendría una merma en su presupuesto anual de unos 60 millones de euros sin disputar la máxima competición europea, pero ahora con el agravante de los efectos económicos que se presuponen por el COVID-19, los daños en el presupuesto pueden mucho mayores porque el club prevé perder parte de los ingresos por abonos, pérdidas de sponsors, y es posible que se rebaje un porcentaje lo recibido por ingresos televisivos.
No ir a Champions provocaría que el club tuviera que vender por casi 100 millones antes de junio de 2021
Es decir, el club ya maneja la idea de negociar con los jugadores una rebaja de sus fichas de cara al próximo curso pero esa idea está, como la mayoría en el club ahora mismo, en la ‘nevera’ a la espera de saber si habrá Champions. Jugar Champions League aliviaría muchísimo la situación y permitiría al club tener un verano parecido a los dos últimos. Por el contrario, no entrar en Champions significaría que el club estaría en la obligación de vender antes del 30 de junio de 2021 por una cifra que rondaría los 90 millones de euros y rebajar su masa salarial entre el 30 y el 40% si no es que el máximo accionista decidiera aportar liquidez a la entidad para paliar las pérdidas.
Los futbolistas saben que esa es la situación del club y que únicamente ellos con sus resultados en las once jornadas que quedan pueden evitar esa situación de colapso económico en la entidad y la obligación en la que estaría la entidad de bajar el nivel económico de la plantilla y casi de manera consecuente perder nivel deportivo en su equipo. Ellos pueden encontrar otros equipos y salir pero también es cierto que muchos de ellos tienen en el Valencia CF un club en el que se sienten muy cómodos y una ciudad que pocos quieren abandonar.