Es uno de los hombres del momento en el Grupo VII de Tercera RFEF. Pedro Sosa, jugador de la AD Villaviciosa de Odón, es el pichichi de su equipo y el segundo máximo goleador del campeonato con ocho goles. El pasado fin de semana le marcó dos a su exequipo, la AD Torrejón CF. De esa y de otras cuestiones relacionadas con su pasado, presente y futuro hablamos con el argentino, que todavía sueña con ser futbolista profesional.
P: Cuéntanos, ¿cómo fueron tus inicios en el fútbol argentino y cómo ha transcurrido tu carrera hasta hoy?
R: Soy argentino, tengo 26 años, nací en la ciudad de Luján y jugué todos los años formativos hasta llegar a sénior en un club que se llama Flandria, que acaba de subir a la Segunda División de Argentina. Yo siempre jugué en una categoría que en la actualidad equivaldría a la Primera RFEF o a la Segunda. Fui canterano del club, jugué durante varios años y formé parte de la plantilla que en el 2016 salió campeona y subió de Primera RFEF a Segunda División. Estuve en la plantilla de Segunda División y era más suplente que titular, pero fue una buena experiencia. Luego volvimos a bajar a Primera RFEF, estuve un año y me terminé viniendo a España. Estuve en el Flat Earth FC de Tercera División hasta que nos paró la pandemia y luego estuve, como todo el mundo, un tiempo parado. Después, estuve muy poquitos meses en un equipo de la Serie D italiana que se llama Atlético Porto Sant’ Elpidio, pero fue una experiencia rara. Me costó acomodarme, el torneo estuvo un mes y medio parado por el Covid y, cuando volví, el club se había quedado sin sponsors, así que se desprendió de los jugadores que éramos de fuera. Y así es como en el mes de diciembre llegué al torrejón, hasta mayo, que fue cuando jugamos la semifinal del ascenso contra el CD Móstoles quedando eliminados en el 120′. Y ahora estoy aquí, en el Villaviciosa.
P: ¿Dónde nació tu pasión por el fútbol o quien fue la persona que te inspiró para querer dedicarte a ello?
R: La persona que me inspiró y me transmitió su pasión por el fútbol fue mi padre, porque es muy fanático y desde muy chico me contagió ese amor por el fútbol que, por suerte, llevo hasta el día de hoy.
«La persona que me inspiró y me transmitió su pasión por el fútbol fue mi padre»
P: ¿En qué momento te diste cuenta de que podías vivir del fútbol o, al menos, dedicarte profesionalmente a ello?
R: Yo desde chico siempre soñé con ser jugador de fútbol y vivir de ello. Obviamente todo el mundo tiene altibajos y no todos llegan, pero el momento en el que yo pensé que podría vivir del fútbol fue con 20 años, cuando estaba con el Flandria en la Primera RFEF. Tuve mis primeros minutos y justo se formó un combinado sub-23 de esa categoría en toda Argentina y viajamos a competir en un torneo internacional a la India en representación de Argentina, y yo fui uno de los seleccionados. Ese fue un punto que me marcó bastante y que me hizo pensar que podía dedicarme profesionalmente al fútbol. Y a continuación, a los 6 meses, subimos con el club a Segunda División.
P: El Flandria ha sido el equipo que ha marcado tu carrera deportiva. ¿Allí en Argentina también se vive con mucha pasión el fútbol modesto o la gente solo se aficiona a clubes grandes como Boca o River?
R: La gente quizá se aficiona a grandes clubes, pero el caso de Flandria es un caso particular. Queda en un pueblo con no muchos habitantes. No tengo muy claro cuántos tiene, pero todos son hinchas de Flandria y después animan a Boca, River, Racing… Justo ahora se vivió un momento muy especial porque volvieron a subir a Segunda División y estaba todo el pueblo en el campo mirando al equipo. Había unas 6.000 o 7.000 personas. En esas categorías también se vive con muchísima pasión.
«todos son hinchas de Flandria y después animan a Boca, River, Racing…»
P: Como bien has comentado, cuando viniste a España lo hiciste de la mano del Flat Earth FC. ¿Cómo surgió tu llegada?
R: A través de un representante que conocía a Javi Poves tuve la oportunidad de venir a jugar al Flat Earth FC. Yo con los representantes hablé de que quería venir a jugar a Europa, sobre todo a España. Me salió esa oportunidad, no lo dudé y me vine. Fue una linda experiencia.
P: ¿Llegaste a imaginar que el Flat Earth FC podría terminar desaparecido o, mejor dicho, comprado por el Fuenlabrada?
R: No, la verdad es que no lo imaginaba. A Javi Poves lo veía muy comprometido y con muchas ganas de avanzar, pero no fue fácil y terminó vendiendo el club. Sinceramente, pensé que era un proyecto que iba a continuar porque detrás del equipo y de todo lo que implicaba había una idea que respaldaba al club. Pensé que iba a tomar más fuerza y a seguir creciendo.
«al final no llegamos a un acuerdo, contrataron a otros jugadores y así fue que decidí no continuar»
P: El año pasado jugaste a muy buen nivel con la AD Torrejón CF gracias a la confianza que en ti depositó Joselu. ¿Qué ocurrió para que no continuases ligado al proyecto?
R: El club tiene sus proyectos. Hubo un cambio de entrenador y buscaban una determinada forma de jugar. Realmente, año a año se renueva las plantillas y cada uno trata de armar la suya a su gusto. Yo estuve en charlas con quien es ahora el entrenador del equipo, Alberto, y él me manifestó su deseo de que yo continuase. Estuvimos negociando, pero al final no llegamos a un acuerdo, contrataron a otros jugadores y así fue que decidí no continuar y buscar otras cosas.
P: A muchos les pudo sorprender que firmases por un equipo recién ascendido después de haber marcado siete goles por temporada en dos equipos punteros en la categoría. ¿Qué motivó tu decisión?
R: Por suerte, tuve bastantes clubes interesados, pero hubo un par de cuestiones personales familiares y de trabajo que me llevaron a decidir que la mejor alternativa para mí era el Villaviciosa. En el plantel tengo algunos amigos y eso también fue algo muy importante para mí. El Villaviciosa se acomodaba mucho mejor a mi vida familiar y laboral, y esa es prácticamente la razón.
«estoy en un grupo muy unido y en el que me siento muy importante dentro del campo»
P: En media temporada has superado ya tus mejores registros goleadores. ¿Cómo de importante te sientes en el equipo?
R: La verdad es que estoy en un grupo muy unido y en el que me siento muy importante dentro del campo. Por suerte, lo puedo demostrar a la hora de jugar. Ahora estoy con confianza. Uno tiene partidos buenos y malos, pero el delantero vive del gol y he tenido partidos en los que no lo hecho muy bien y sin embargo tuve la ocasión de convertir. Estoy contento porque estoy pudiendo convertir y eso me da confianza. Y se debe a diferentes factores. Uno es mi forma de juego, ya que mi instinto siempre es buscar el gol. Y el otro, que me siento muy cómodo en el equipo.
P: Háblanos de Nano. No te da ningún respiro y confía plenamente en ti. ¿Qué destacarías de él como entrenador tanto a nivel personal como a nivel profesional?
R: Nano es una gran persona que, cuando se dio la posibilidad de ir al Villaviciosa, se interesó muchísimo por mí, algo que le agradezco enormemente. Gestiona muy bien el grupo, encara muy bien los partidos, elige la manera de plantearlos y analiza bien al rival. Nosotros evidentemente tendremos nuestra forma de jugar con nuestras virtudes y nuestros defectos, pero él suele adaptar eso en base al rival para contrarrestarle. Hay muchos partidos en los que lo hemos hecho muy bien y la verdad que se nos han escapado puntos por detalles. Creo que podríamos estar mucho más arriba, aunque ahora estamos en una línea de acomodarnos, sobre todo en los últimos tres partidos en los que venimos sumando. La idea es seguir por esa línea de conceder lo menos posible para tratar de sumar puntos. Es una liga muy larga de 40 partidos y todavía falta mucho. Lo importante es tratar de sumar todo el tiempo, y ojalá uno pudiera aspirar a estar lo más arriba posible. Pero bueno, hoy la realidad nos marca que estamos en la zona de abajo.
«Nano es una gran persona que, cuando se dio la posibilidad de ir al Villaviciosa, se interesó muchísimo por mí»
P: Estás atravesando una muy buena racha de goles. Recientemente le marcaste dos a tu exequipo para remontar el partido. Explícanos, ¿cómo lo viviste desde dentro?
R: Sabíamos que nos enfrentábamos a un rival muy complicado que se armó para estar arriba, y en los diez primeros minutos salimos muy bien. Tuvimos tres chances claras y ellos todavía no habían pasado la mitad del campo. En la primera que tuvieron nos hicieron el gol y creo que nos costó. Fue un golpe bastante fuerte para nosotros y creo que a partir del gol no lo hicimos bien. Por suerte llegó descanso y en el segundo tiempo salimos mejor. El gol fue importante porque nos hizo bien anímicamente y a ellos realmente les costó a partir del 1-1. Se empezaron a venir abajo y pudimos aprovecharlo para quedarnos con los tres puntos.
P: El 1-1 no lo celebraste, pero el 2-1 sí. Quizá porque el primero no lo esperabas y el segundo te causó mayor euforia…
R: La situación del primer gol es una presión que yo, por mi forma de jugar, siempre hago. Le dieron una pelota complicada al arquero y cuando él quiso patear, yo le termine robándole el balón y haciendo el gol. No lo festejé por la simple razón de que soy amigo del portero, compartimos el año pasado y tengo una muy buena relación con él. Me parece que es una excelente persona y un excelente portero. Yo no quería hacerle ni uno ni dos, sino tres goles para ganar el partido, pero me dio bronca hacer el gol de esa manera porque es un porterazo. En el primer tiempo tiré un cabezazo a la escuadra y lo atrapó como si yo hubiera cabeceado despacito. En la acción del primero le enviaron una pelota complicada atrás, pero no me gustó haberle hecho ese gol, por eso no lo festejé. El segundo gol fue muy lindo, en lo personal me gustó y obviamente lo festejé.
«No lo festejé por la simple razón de que soy amigo del portero, compartimos el año pasado y tengo una muy buena relación con él»
P: Repasando un poco tus estadísticas he visto que no solo metes muchos goles, sino que además ves muchas tarjetas amarillas. ¿Ese nivel de intensidad es algo que va implícito en tu juego o tiene que ver con la posición clasificatoria del equipo y lo que hay en juego?
R: Pienso que tiene que ver un poco con mi forma de juego. Lamentablemente estoy acostumbrado a saltar abriendo los brazos para protegerme, porque en Argentina, cuando viene a la pelota arriba, si no me cubro me pegan el codazo a mí. Acá solamente salto a cubrirme y los defensores gritan mucho. Hay veces que sí les doy, pero no tengo mala intención. Otras casi no les tocó y gritan como si les hubiera matado. Me tengo que acomodar a cómo se juega acá, y las tarjetas me parece que la mayoría son por eso. Hay veces que uno presiona un poco de más y se le va la pata, pero no mucho más que eso.
P: El 2021 está cerca de su fin. ¿Qué resumen haces de él?
R: Creo que a nivel futbolístico y personal ha sido un año muy bueno porque el 2020 terminó yéndome del Flat Earth FC por el Covid, para luego estar en Italia en un lugar en el que nunca terminé de acomodarme por la situación sanitaria. Decidí regresar a Madrid, que era un lugar que ya conocía y en el que siento que estoy muy cómodo, y con el Torrejón pasamos en seis meses de estar en puestos de descenso a jugar los playoffs de ascenso y quedarnos a un pasito de subir. Y ahora estoy en un equipo, el Villa, que de entrada tiene como objetivo principal mantener la categoría. Pero, aunque estemos en la zona baja, me parece que la categoría está muy pareja y que vamos a poder lograr el objetivo. En lo personal me siento muy cómodo y con mucha confianza. Estoy haciendo goles y creo que le podemos ganar a cualquiera. Así que el resumen futbolístico del año es muy positivo.
«Actualmente me preocupo por hacer gol todos los fines de semana pero, si vamos a soñar, obviamente me gustaría ir subiendo de categorías, una o dos»
P: Tienes 26 años, y seguro que aspiraciones personales que te gustaría ir cumpliendo. ¿Donde te gustaría verte en los próximos años? ¿Todavía sueñas con convertirte en futbolista profesional?
R: Ese sueño no se pierde nunca. Llevo toda la vida jugando al fútbol y uno siempre aspira a estar lo más alto posible. La realidad es que hay que tener los pies sobre la tierra. Actualmente me preocupo por hacer gol todos los fines de semana pero, si vamos a soñar, obviamente me gustaría ir subiendo de categorías, una o dos. Pienso que va mucho en la confianza, en cómo es cada uno, y creo que el nivel lo tengo. Así que será cuestión de seguir demostrándolo en cada fin de semana y en cada partido, sobre todo con goles y con actuaciones que ayuden al equipo. Y el día de mañana, el tiempo dirá si puedo subir de categoría y competir un poco más arriba.
