World Pádel Tour; Final femenina Estrella Damm València Open.
Tremendo partido el disputado esta mañana en La Fonteta para dilucidar quién se llevaba el Estrella Damm València Open del circuito World Pádel Tour. Tres sets, el último decidido en un tie break épico. Más de tres horas y media de juego. Un derroche de fortaleza física y también de calidad de las cuatro que al final ha dado como vencedoras a la pareja nº1 del mundo, Alejandra Salazar y Gemma Triay.
Ale Salazar-Gemma Triay / Tamara Icardo-Delfi Brea (6-4/4-6/7-6)
Se reeditaba la final de 2021 que se llevaron la valenciana Tamara Icardo junto a su compañera, la argentina Delfi Brea. Las nº1 mundiales, Salazar-Triay, venían de ganar dos torneos seguidos y querían el triplete. Brea e Icardo accedieron a la final eliminando a Ariana Sánchez y Paula Josemaría, mientras que las nº1 dejaron fuera a Marta Ortega y Bea González.
A las primeras de cambio, en el tercer juego, llegó el primer break del partido. Cayó del lado Delfi-Tamara (1-2). Poco les duró la alegría pues las nº1 no permitieron que sus rivales cogieran ventaja y les endosaron el contra break en el cuarto (2-2). La batalla estaba servida, sin tregua, además, pues en el quinto llegó el recontra break con un paralelo maravilloso de Tamara Icardo en el punto de oro (2-3). Brea e Icardo les estaban diciendo ya de primeras a Salazar y Triay que fácil no se lo iban a poner. La sangría de breaks no pararían en el siguiente juego y volvieron a quebrar Gemma y Ale (3-3). Les costaba sostener el servicio a las cuatro. Las cuatro roturas en seis juegos así lo demostraban. Por fin, las nº1 fueron capaces de hacerlo y confirmaron el anterior quiebre (4-3). Se les puso muy cuesta arriba el octavo a Delfi y Tamara con 15-40 y, aunque lo llevaron al punto de oro, Salazar bajó maravillosamente una bola de pared que medio entre las dos y puso el 5-3 en el marcador. Parecía encaminarse el set hacia el lado Ale-Gemma, pero nunca se puede dar por muertas a Delfi y Tamara. Nuevo break en el noveno para ellas, además dejando en 15 a las nº1 para ir a por el empate con su servicio (5-4). De nuevo sacaron las garras Salazar y Triay y se pusieron con 0-40 con cuatro bolas de set. No las desaprovecharon y cerraron la primera manga con ese 6-4.
No se iban a amilanar Tamara y Delfi pues rompieron el primer servicio de las nº1. El partido estaba super igualado y quien menos errores cometiera se lo llevaría. Icardo buscaba con su saque confirmar por primera vez una rotura a su favor. Y lo consiguieron la valenciana y la argentina, además con juego en blanco (0-2). Con la necesidad de Gemma y Ale, y saber que el primer set había sido suyo, podía darse que el partido enloqueciera. Sacaron la rabia las “1” y se anotaron por la vía rápida su servicio (1-2). Se encaminaba el cuarto a una nueva rotura con 0-40, pero Delfi y Tamara sacaron casta y lo levantaron, conservando su servicio (1-3). El partido seguía intenso, pero sin correr riesgos ninguna de las cuatro y solo los errores no forzados podían desnivelar la igualdad. La ventaja de Brea e Icardo se neutralizó con un nuevo quiebre en el sexto (3-3). Las nº1 querían volver a ponerse por delante con su servicio y minimizando errores. Como les decíamos, el partido estaba desatado y Delfi-Tamara, en el punto de oro, consiguieron el enésimo break (3-4). Era el momento de sacar tajada e intentar llevar el partido al tercer set. ¿Lo permitirían las nº1? El intercambio de golpes de calidad en el octavo juego fue memorable, sobre todo de parte de Delfi Brea y Tamara Icardo, que se lo llevaron en el punto de oro (3-5). Lo tenían en su mano con una Fonteta de San Luis ya totalmente enfervorecida. Ganaron su saque Gemma y Ale, pero no fallaron con el suyo Tamara y Delfi. Juego en blanco para quedarse definitivamente con el segundo set (4-6).
Con una hora y cincuenta y cinco minutos de juego había que ir mirando a la reserva de fuerzas para ver qué pareja llegaba con más gasolina a la manga definitiva. Empezaron fuertes las nº1 ganando su servicio y uno de sus rivales (2-0). ¿Bajarían los brazos Brea e Icardo? Nada más lejos de la realidad. Rotura y de nuevo en la lucha (2-1). Recontra break (ya hemos perdido la cuenta de cuántos van en este partido) de las nº1 (3-1). Sacaron fuerzas de flaqueza Delfi y Tamara y de nuevo, ¿qué pasó? Pues eso. Nueva rotura. El 3-2 con saque para Icardo era un nuevo reto para ellas. No iban a ser menos Salazar y Triay, pues quebraron con solvencia el sexto juego (4-2). Quince roturas en veintiséis juegos. Casi nada. Si conservaban su saque las nº1 en el séptimo se antojaba imposible que se les escapara el partido. ¿Serían capaces Brea e Icardo de llegar vivas al final? Tuvieron dos bolas para quebrar el servicio de Triay (30-40 y punto de oro). Pero apareció Gemma para cruzar una bola imposible para Tamara (5-2). ¿Definitivo? Tras un punto de oro donde ninguno de los 5000 espectadores de La Fonteta osó respirar, Brea e Icardo conservaron su servicio llevando el partido al 5-3. Puntazo. Tres bolas de partido para Ale y Gemma. Pero el partido tenía que decidirse en el punto de oro. Y no fue el definitivo, porque se lo anotaron Delfi y Tamara con un bolón de la argentina. Con el partido en 5-4 cualquier cosa podía pasar. Dos horas cincuenta y tres minutos de juego. Qué barbaridad. Tamara y Delfi me daba la sensación que por aquel entonces habían sacado los topes a sus brazos y las bolas todas eran tensas, con fuerza, sin ahorrarse ni un ápice de potencia. Y con ello consiguieron conservar su saque y poner el 5-5 en el luminoso de La Fonteta. Tres horas de juego. De locos. Y por su fuera poco, Tamara y Delfi fueron capaces de levantar un 40-15 y, en el enésimo punto de oro, lograron el break (5-6). Los nervios florecieron en las cabezas de Ale y Gemma. Pero si algo tienen estas dos jugadoras, además de calidad, es temple. Supieron mecer los nervios y llevaron el partido a donde se merecía: el tie-break (6-6). Todo a una carta. Nada de lo sucedido en las tres horas y cuarto anteriores valía para nada. Y esta muerte súbita respondió a lo que fue el resto de partido. Brea e Icardo gozaron de dos bolas de partido. Triay y Salazar otra. Igualaron Delfi y Tamara. Pero otro sprint final permitió a las nº1 demostrarlo una vez más. Lo pasaron mal. Muy mal. El mejor partido de la temporada en el cuadro femenino sin ninguna duda y un nuevo título para la mejor pareja del mundo.
