Le llamaban ‘el samurái‘ por la melena que lucía desde su juventud. Se formó en la cantera del Sevilla FC, con el que debutó en Primera División en 1997 en un encuentro ante la Real Sociedad. Aquí empezó a hacerse popular José María Romero Poyón (Sevilla, 10 de diciembre de 1978), más conocido como José Mari. Delantero que llegó a ganar una medalla de plata en los Juego Olímpicos de Sidney 2000 y que tuvo su clímax deportivo cuando fichó por el AC Milan en una de las etapas gloriosas del club italiano. Tras colgar las botas, cambió su imagen de forma radical. Esta es su historia.
Desde pequeño despuntó como delantero en las categorías inferiores del Sevilla FC. Tras debutar en Primera División con el conjunto hispalense, el Atlético de Madrid se hizo con sus servicios en 1997, club donde permaneció tres temporadas. En el conjunto colchonero dio sus mejores años de fútbol y el AC Milan decidió acometer su contratación en 1999 a cambio de un traspaso millonario. De hecho, fue el primer futbolista español que jugó en el conjunto rossonero. En Italia jugó otras tres campañas, regresando la última de ellas al Atlético en calidad de cedido.
Debutó en Primera con el Sevilla, se marchó al Atlético y alcanzó el clímax de su carrera cuando fichó por el AC Milan

En verano de 2003 se marchó al Villarreal CF, donde volvió a disfrutar del fútbol después de unos años en los que no tuvo minutos en Italia. En Castellón jugó cuatro temporadas a un buen nivel y conquistó dos Copas Intertoto, las de 2003 y 2004. El curso 2007/08 vuelve a su tierra pero esta vez para enrolarse en las filas del Real Betis Balompié en la temporada del centenario.
Las cosas no le van bien en el conjunto bético y en diciembre recala en el Gimnàstic de Tarragona de Segunda División. Aquí empieza el declive de su exitosa carrera y en verano de 2010, tras un irregular paso por el Nàstic, ficha por el Xerez CD. Cuando se pensaba que José Mari ya no volvería a ser el de antes, firma 19 goles, lo que supone su temporada más goleadora como profesional. El curso 2012/13 sufre una grave lesión que supone su retirada definitiva de los terrenos de juego.
Bétis, Nàstic y Xerez fueron sus otros equipos antes de anunciar su retirada la temporada 2012/13
José Mari tuvo una gran carrera profesional y además pasó por todas las categorías de la Selección Española, además de jugar con la absoluta cuatro partidos y conseguir la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Sidney donde marcó tres goles.
Tras colgar las botas José Mari se resignó a perder su forma física. Siempre había sido un futbolista dotado de un buen físico, pero su complexión era delgada. Sin embargo, una vez se retiró decidió moldear su cuerpo y a base de gimnasio consiguió unos músculos descomunales. Del José Mari futbolista se pasó al José Mari culturista. El cambio de imagen fue radical, porque además, se cortó su popular melena y se dejó perilla, lo que hace que poco se parezcan las fotos actuales a las de antaño. El sevillano está muy orgulloso del cuerpo que ha conseguido y lo luce con entusiasmo en sus redes sociales. Así se ha convertido en un auténtico influencer del fitness a través de su cuenta de Instagram. Con 42 años está hecho un chaval.
Con 42 años se ha convertido en influencer del fitness a través de cuenta de Instagram donde luce sus descomunales músculos con orgullo
«Cuando te retiras estás desubicado. No sabes qué hacer, por lo que necesito tener la mente ocupada. Me propusieron abrir un restaurante en Sevilla y estoy muy contento. Los Juegos de Sidney fueron una de mis mejores experiencias de mi carrera deportiva», aseveró José Mari en una entrevista para la Selección Española. Además de abrir un restaurante y dedicarse al fitness, José Mari no se ha desmarcado del fútbol, ya que continúa ligado de alguna manera como comentarista deportivo en diferentes cadenas de televisión.