La haltera alzireña Alba Sánchez vuelve a sonreír. Tras pasar una temporada complicada en materia de lesiones, que le impidieron participar en el Europeo Júnior y en el Europeo y Mundial Absolutos, el inicio de este 2019 no puede ser más prometedor.
La integrante del Proyecto FER ha sido convocada para el próximo Campeonato de Europa Absoluto, campeonato que se disputará en Batumi (Georgia) del 6 al 13 de abril. Así lo ha decidido el seleccionador nacional Matías Fernández en una lista de 13 deportistas entre los que se encuentra la valenciana.
Poco a poco Alba se está reencontrando con la mejor versión de sí misma. A finales de febrero, en su Alzira natal, se colgó la medalla de plata en la 17ª edición de la Copa de España Sénior. Un metal que conquistó al sumar 253,07 puntos tras ser superada únicamente por la madrileña Ana de Gregorio Lorenzo (260,46 puntos). La canaria Ilia Hernández Martín fue bronce (248,98).
En Golsmedia Sports hemos hablado con ella para conocer de primera mano cómo afronta su regreso a una competición internacional y qué objetivos se ha marcado a medio y largo plazo.

Vuelta a un Europeo Absoluto
A muchos deportistas les ocurre que cuando se encuentran en la cima o casi rozándola todo se desmorona. Eso le ocurrió a Alba, a la que las lesiones le llegaron cuando aspiraba a lo máximo. «Quería renovar medalla y ser campeona de Europa Júnior para despedirme, estaba entrenando para ello, pero me lesioné. Ha sido muy duro», relata.
Un varapalo que reconoce que anímicamente le afectó hasta el punto de que tuvo que ser tratada por un psicólogo deportivo, una figura que reivindica como «necesaria» y de la que critica los tabúes existentes. «Todos hablan del psicólogo deportivo con miedo como si fuera para gente que está loca y eso no es cierto», denuncia.
Una grave lesión la dejó sin su último Europeo Júnior.
«El deporte al final trata 100% de la mente y los problemas te afectan llegando a un punto que no sabes para dónde ir y te metes en una espiral impresionante. Yo lo he necesitado muchas veces y me ha ido muy bien. Todos los deportistas de élite deberían ir, es fundamental», agrega.

Alba ha llevado a la práctica el refrán que reza que de todo lo malo hay que extraer el lado positivo. Ella lo ha hecho, ha resurgido como el Ave Fénix. «Todos queremos ganar pero tras tantas lesiones al final aprendes que hay que disfrutar del camino porque hoy estás aquí pero mañana no lo sabes. La vida del deportista es muy corta», explica.
«Ya no me obsesiona ganar. He aprendido a disfrutar del camino».
Por todo ello la alzireña valora más si cabe su convocatoria para el próximo Campeonato de Europa Absoluto, donde quiere limitarse a disfrutar y no exigirse mínimas que le puedan obsesionar. «Cojo con más ganas si cabe este Europeo. Es una nueva oportunidad y voy a luchar por ella», apunta.
¿Cuáles son los rivales a batir? Alba destaca por países a Rumanía al tiempo que a una Rusia de la que condena abiertamente el dopaje. «No puedes competir con Rusia porque allí te dan subvenciones por doparte cuando aquí te lo dan por ganar medallas. Siempre lo van a defender y así es muy complicado», lamenta.
Valoración inicio 2019
Como se ha mencionado con anterioridad, Alba viene de proclamarse subcampeona en la Copa de España Sénior. Una medalla que reconoce abiertamente que no esperaba y que ha reforzado considerablemente su autoestima. «Estaba entrenando bien pero no tenía expectativas de subir al podio, iba sólo a hacer mi competición lo mejor posible y ya está», indica.
«Esta medalla me ayuda a creer más en mí misma, en tener más seguridad», añade. Un podio que pudo dedicar a su gente por celebrarse en Alzira y que hizo más especial si cabe su regreso al éxito aunque este como ya ha señalado no le obsesione en absoluto ya.
«Afronto el Europeo Absoluto como una nueva oportunidad».

Objetivos a corto plazo
La temporada ha comenzado a pedir de boca pero, ¿cómo le gustaría terminarla? Alba lo tiene claro: aspirando a todo en el Europeo Sub-23. «Mi gran Europeo será el Sub-23 que se celebra el próximo mes de julio, ojalá pueda luchar por el título. El Absoluto me va a servir para foguearme como si fuera un entrenamiento más, así se compite mejor», asegura
La alzireña no quiere desaprovechar la oportunidad para criticar una situación recurrente en su experiencia como deportista. «Cuando estás bien y ganas algo todo el mundo se acuerda de ti y te felicita pero en los momentos malos no es así. Cuando te quitan de la noche a la mañana lo que te da la felicidad, lo que sabes hacer es duro y necesitas apoyo», critica.
«Mi objetivo esta temporada es el Europeo Sub-23, ojalá pueda luchar por el título».
Objetivos a largo plazo
No se marca tiempos pero su ambición con el transcurso del mismo es cristalino. Por un lado ganar un Europeo Absoluto y participar en unos Juegos Olímpicos. Sobre este último, Alba reconoce que se está preparando para poder estar en Tokio 2020 aunque considera que es temprano.
«Nunca se sabe porque luego todo depende de los resultados. Yo estoy trabajando con esa mentalidad para clasificarme, otra cosa es que lo consiga. No me cambiará el no hacerlo porque lo veo como una meta a largo plazo», agrega la subcampeona de Europa júnior.
Metas a largo plazo: ganar un Europeo Absoluto y participar en unos JJOO.

Ser mujer y haltera
Muchas deportistas han denunciado la discriminación que sufren por el simple hecho de ser mujeres en multiplicidad de modalidades deportivas en las que las brechas salariales respecto a los hombres son abusivas. ¿Ocurre lo mismo en la halterofilia? ¿Es más complicado dedicarse a ella siendo mujer?
«Hace unos años era complicadísimo ser mujer en la halterofilia. Recuerdo como hasta algunas mujeres decían que este deporte era sólo para hombres. A mí me han llegado a decir que tendría las piernas tan fuertes que no podría llevar tacones», narra.
«Me dijeron que tendría las piernas tan fuertes que no podría llevar tacones».

Una situación que según Alba ha experimentado un cambio radical y muy positivo. «Se han intercambiado los papeles, ahora las mujeres están mucho mejor vistas e incluso nos consideran sexys», añade.
Eso sí, a nivel económico las cosas continúan siendo muy complicadas y poder vivir con ciertas comodidades conforma prácticamente una utopía. «Si eres bueno y consigues medallas internacionales puedes vivir con un sueldo normal y a duras penas como la mayoría de los españoles», comenta.
«Ahora las mujeres están mucho mejor vistas que antes».
Un futuro sin la halterofilia
Precisamente por ello resalta la labor de entidades como el Proyecto FER cuyas becas son un revulsivo muy importante. Ahora bien, siempre has de estar en el top para seguir disfrutando de dichos privilegios como Alba nos cuenta. Por ello, aunque no quiere darnos muchos detalles, la valenciana tiene planificado su futuro una vez acabe la halterofilia.
«El miedo a que la próxima lesión sea la definitiva te hace tomar encarrilar tu futuro por lo que pueda pasar. Yo lo he hecho, seguiré relacionada de cierta manera con el deporte. Pero eso ya se verá», sentencia.