Dominic Thiem se aseguró este martes su clasificación a semifinales de las Nitto ATP Finals por segundo año consecutivo. El austriaco se colocó al frente del Grupo Londres 2020, tras derrotar a Rafa Nadal por 7-6(7) y 7-6(4) en dos horas y 25 minutos. Luego el agónico triunfo de Stefanos Tsitsipas sobre Andrey Rublev terminó enviando al austriaco a la ronda de los últimos cuatro.
Nadal, por su parte, necesitará de una victoria ante Tsitsipas para clasificarse a semifinales. En el día de ayer era la primera vez que se medían Nadal y Thiem en pista dura cubierta y el partido se presumía una batalla ajustada. Un choque entre dos estilos que no renuncian al largo cara a cara cuando sea preciso.
Thiem ganó a Nadal por 7-6(7) y 7-6(4), por lo que el tenista de Manacor se jugará el pase ante Tsitsipas
Ni Nadal ni Thiem estaban dispuestos a conceder un palmo con sus servicios. Ninguno de los dos cedió una sola opción de break y prácticamente calcaron sus números con el servicio. Una mínima ventaja en el saque fue lo que marcó la diferencia del lado de Thiem en el tie-break, donde se sucedieron las alternativas tras una primera hora muy ajustada. Tres puntos consecutivos del número 3 del ranking ATP actual le concedieron la primera manga 9-7.
A pesar de no poder anotarse el set inicial, Nadal no desistió en su nivel de intensidad al resto para fabricar la primera oportunidad de quiebre del encuentro. Sin embargo, la confianza de Thiem para conectar agresivos y valientes tiros de fondo le sirvieron para escapar de todo peligro. El balear no desistió en su empeño. En el séptimo juego elevó el nivel de nuevo para disfrutar de su segunda oportunidad de quiebre, que esta vez no perdonó (4-3). La igualdad continuó como seña de identidad en The O2. Thiem respondió con un 15/40 para contrarrestar el break (4-4).
Estuvo cerca de cerrar el partido unos minutos después, al colocarse 5-4, 0/40. Fue entonces cuando Nadal recurrió al pundonor y su talento para levantar tres puntos de partido (5-5). Una vez más el set se decidiría en el tie-break. Era la única fórmula para que el español permaneciera con vida en el partido, pero Thiem volvió a anotarse el desempate y la victoria final.
