Los de Alberto Montes son, tras el pinchazo del Torrent, el único equipo del Grupo II que todavía sigue sin probar el sabor amargo de la derrota. Hemos hablado con el técnico sobre el ambiente que se respira dentro del líder de la categoría.
Muy buenas sensaciones son las que está dejando el Juventud-Barrio del Cristo en estas doce jornadas disputadas en la Preferente valenciana. Y es que los pupilos de Alberto Montes se han convertido en este inicio liguero en uno de los mejores equipos de toda la categoría, ya que son líderes en solitario de su grupo debido al sensacional rendimiento mostrado hasta ahora, en donde continúan sin haber salido derrotados de ningún duelo y, además, mantienen la condición de intratables en su feudo después de sumar 18 de 18 puntos posibles, algo que ha desembocado en que El Perdiguer se abarrote partido tras partido, como así sucedió el pasado sábado ante el Llíria (2-1). “Estamos que nos subimos por las paredes de la ilusión y ganas que tenemos por seguir haciendo las cosas como hasta ahora, puesto que el equipo está demostrando que las horas y horas de trabajo que hacemos en los entrenamientos tienen su recompensa. No obstante, sabemos que la temporada acaba de empezar pero qué mejor que estar arriba para llenarnos de moral y ambición para el resto de partidos, ya que se ha creado un vestuario muy competitivo en el que si te despistas puedes quedarte fuera de la convocatoria, algo que los jugadores entienden y ven como un apasionante reto”, declaró Alberto Montes a Golsmedia.
Y es que, como nos apuntaba el técnico del Juventud, el momento por el que atraviesa el equipo no es casualidad, ya que “el club ha dado continuidad al proyecto iniciado la campaña pasada y además se ha volcado en construir un cuerpo técnico y plantilla todavía mejor, algo que ha permitido al vestuario crecer, tanto a nivel futbolístico como anímico”, nos señaló el técnico, que no desaprovechó la ocasión para resaltar “el enorme trabajo” del cuerpo técnico y en especial de Braulio, su segundo y exjugador del club, que llegó este verano después de haber estado junto a Pablo Jiménez en la UD Alginet, equipo puntero, y líder a día de hoy, del Grupo III. Sin embargo, cabe destacar el gran recorrido que todavía queda para el final de campaña, algo que saben bien en un vestuario que se centra en ir “poco a poco”, ya que “nos hemos convertido en el equipo a batir y se nota que nuestros rivales salen extra motivados cuando estamos nosotros delante, por lo que no podemos ni por un instante bajar la guardia porque a la mínima te sorprenden”, explicó el del Juventud a nuestro medio, en donde puso como ejemplo a su argumento la derrota del Torrent frente al Històrics, mostrando de esa manera el nivel competitivo que existe este año en el grupo.
A raíz de esto último, Montes también nos comentó la forma en la que el equipo ha ido evolucionando desde el primer partido, ya que “en los primeros encuentros logramos varias goleadas pero si uno se fija en los últimos resultados la verdad es que los marcadores son muy justos, algo que a nosotros nos afecta de lleno sobre todo porque los rivales nos van conociendo y quieren ser los primeros en poder derrotarnos”. De hecho, el Juventud ha pasado por más de un apuro, sobre todo a domicilio, para seguir manteniendo su condición de invicto, ya que en los últimos cuatro partidos fuera de El Perdiguer no han podido conseguir la victoria y han tenido que sudar sangre para no caer ante el Torrent (2-2), Albuixech (0-0), Catellar-Oliveral (1-1) y Buñol (1-1).
Así pues, este fin de semana se les presenta una nueva oportunidad para volver a la senda del triunfo o para “no parar de sumar a domicilio”, como nos recalcó Alberto Montes. Será en Los Silos y frente a un Burjassot en horas bajas y posicionado a día de hoy en farolillo rojo, situación de la que no se fía el técnico del Juventud. “Este es un partido trampa y tanto el cuerpo técnico como los jugadores lo sabemos, ya que son estos encuentros los que se suelen atragantar fruto quizá de una posible confianza que nosotros no vamos a permitir, ya que tenemos la suerte de tener una larga plantilla que se juega el puesto en cada entrenamiento”. Para mayor alegría de los de L’Horta Oest, el equipo recuperará a Soler para este encuentro después de que el mediapunta haya permanecido un mes alejado de los terrenos de juego por lesión. “Soler es un jugador que marca diferencias por lo que es muy importante para nosotros su vuelta. Además, junto a él se une también Boluda, el último fichaje, que ya ha tenido minutos en los dos últimos choques y nos está aportando esa experiencia y veteranía tan necesaria para un equipo”, sentenció Montes. Aun así, la enfermería de El Perdiguer no está vacía, ya que Pascu y Poveda siguen recuperándose de sus problemas físicos.