El equipo ilicitano tiene ya confirmada de forma matemática su continuidad en la categoría en la temporada de su regreso a la máxima categoría del fútbol juvenil.
El Kelme no va a sufrir en las últimas jornadas del campeonato por alcanzar el objetivo marcado antes de iniciar la competición. El equipo alicantino, que volvía a División de Honor Juvenil, se fijó como meta la permanencia y la ha conseguido sin ningún tipo de sufrimiento.
El conjunto de Fran Beltrán (en la foto), lejos de merodear por la zona baja de la tabla, se instaló en los puestos alto de la clasificación desde el pistoletazo de salida, tanto es así que fue la gran revelación en el primer tramo liguero.
Si bien es cierto, con el paso de las jornadas el Kelme fue alejándose de los primeros puestos aunque ha conseguido dar algún que otro susto a los grandes del Grupo VII de División de Honor Juvenil.
La permanencia matemática llegó en la jornada 26 cuando el Kelme goleó al Albacer en su feudo y el Castellón perdió en Valencia. Sin lugar a dudas, un broche de oro para una gran temporada. En su último partido, el equipo cayó derrotado ante el Huracán, que se jugaba consumar su descenso a Liga Nacional.
Los rojiblancos se avanzaron por mediación de Vicente Martínez, pese a ello Manu Castelló empató aunque, sobre la campana, Ginés Sánchez marcó el tanto de la victoria para la escuadra valenciana.
El Kelme es séptimo con 40 puntos (11V-7E-9D) con 38 goles a favor y 27 dianas en contra. Con estos números los ilicitanos están en la zona media de la tabla y con la permanencia ya certificada de forma matemática.
El próximo partido del equipo de Fran Beltrán será este próximo fin de semana, cuando el Kelme se medirá al Hércules a las 16:00 horas, con los blanquizules jugándose el descenso a Liga Nacional.