Jugó con fuego el Saguntino en el último tramo de partido y al final se quemó. La ventaja que tenían los romanos con el gol de Julià de penalti a la media hora de juego se quedó en empate en el ’94 con el Roda volcado en el área saguntina por mediación de Jairo, que desvía el disparo de Alberto Ramos con su espalda.

Con el punto de mira en los puestos de promoción de ascenso llegaba el Saguntino a la Ciudad Deportiva Pamesa. Dos victorias consecutivas catapultaron a los romanos hacia los puestos nobles de la tabla, pero faltaba confirmar ese buen inicio en un estadio complicado como el del Roda. Los de Vila-real venían de perder con contundencia en El Collao frente al líder Alcoyano, 4-0 y necesitaban un buen partido para redimirse. Empezó apoderándose de la pelota el conjunto gualdinegro y ya a los diez minutos José Luis se plantó a trompicones delante de Lluna, que le ganó la partida en el mano a mano. Pero poco a poco el equipo de Beni Espinosa se fue sacudiendo el dominio del de Pepe De La Sagra.

Se igualó la contienda pero las ocasiones brillaban por su ausencia. La pelea estaba en el centro del campo sin que ninguno de los dos se hiciera con el control del partido. Un centro desde la izquierda de Gimeno no pudo rematarlo Marc Cosme, que llegó muy forzado en carrera en posición, eso sí, idónea para poder haber abierto el marcador. Se jugaba más en terreno de juego del Roda. Y en una de las ocasiones en las que los romanos colgaron un balón al área a balón parado llegó el penalti. El colegiado señaló un agarrón dentro del área local, a instancias de su juez de línea, y lo sancionó con la pena máxima. Julià fue el encargado de transformarlo cuando se cumplía la media hora de juego. El Roda tenía que espabilar y lo hizo. Ganó metros, sabedor también el Saguntino que podría correr en contragolpe más cómodo a partir de ese momento. En un balón colgado al área de Lluna tuvo que sacar en última instancia Gimeno una pelota suelta que no encontró ninguna bota gualdinegra para empujarla cuando se cumplía el tiempo de descanso.

A los cinco de la reanudación Beni Espinosa introdujo un cambio en el Saguntino saltando al césped Duco en sustitución de Toni para reforzar su línea medular. A los ’53 lo intentó Gonzaga desde la corona del área, pero su disparo se marchó ligeramente alto. El partido estaba bonito, interesante, intenso, con el Roda en busca del empate y el Saguntino sin renunciar a matarlo antes del final para no sufrir. Tras una buena combinación colectiva Ortega probó desde lejos y la pelota tuvo que desviarla a córner Lluna cuando se colaba por la misma escuadra.

En ese mismo saque de esquina, botado por Meseguer muy cerrado, casi llega el empate con 61 minutos de juego, pero el esférico se paseó por el área pequeña sin encontrar rematador. No lograba sacar contraataques el Saguntino y lo estaba pagando con el acoso cada vez más intenso del Roda. En el ’73 Gonzaga cabeceó rozando el larguero un centro desde la derecha del ataque del equipo gualdinegro. Lo seguía intentando el cuadro local y en el ’80 una dejada con el pecho de Charly Gracia, que acababa de ingresar en el verde, fue rematada de primeras por Íker con la izquierda pero sin encontrar portería.

Para aquel entonces, el Saguntino no era capaz de hacer otra cosa que achicar balones que los locales metían en las inmediaciones del área de Lluna. El premio por no desfallecer en el intento llegó justo cuando se cumplía el último minuto del descuento. Corría el minuto 94 y en un barullo en el área Jairo, tras disparo de Alberto Ramos que rebotó en su espalda, igualaba la contienda. No hubo tiempo para más y el reparto de puntos se hizo efectivo nada más sacar de centro el Saguntino.

El gol del Roda en el último suspiro priva al Saguntino de asaltar las plazas de promoción de ascenso en solitario. Eso sí, se colocan cuartos con los mismos puntos que Hércules “B” y Alzira, quinto y sexto respectivamente. Eso sí, los alzireños cuentan con un partido menos. La próxima semana el Roda viajará a Atzeneta, mientras que el Saguntino recibirá en el Nou Camp de Morvedre al Vilamarxant.