El cuadro granota no podrá echar mano más de uno de sus últimos refuerzos de este mercado de invierno, Manu Miquel, después de que debutase de la peor forma posible: con una lesión grave de rodilla.
Si hace menos de un mes era Cote quien se tenía que despedir del resto de temporada por lesión, esta semana Manu Miquel Serrano (23 de agosto de 1994, La Palma del Río -Córdoba-) le seguirá para desgracia los pasos después de que se hayan confirmado los peores augurios acerca del percance físico que sufrió el futbolista, una de las caras nuevas llegadas al Atlético Levante en el mercado de invierno –cedido por el Albacete-, que no pudo concluir el duelo del pasado domingo frente al Lleida (4-0) al romperse, como así ha hecho oficial el cuerpo médico granota, el ligamento cruzado a la par de tener además afectado el menisco y el ligamento externo.
Así pues, y con un periodo de baja aproximado de más de seis meses, Manu Miquel tendrá que ver desde las gradas cómo los de Villafaina tratan de alcanzar el objetivo de la permanencia, algo que se está complicando debido a la imposibilidad de poder toda la plantilla ejercitarse día tras día debido a los problemas con la enfermería que atraviesa, algo que el club confía en que cesen cuanto antes para así buscar la tan deseada regularidad. Y es que el Atlético Levante se ha complicado la vida en este tramo de curso después de sus últimos resultados, estando a día de hoy colocado en zona de descenso con 23 puntos (6V-5E-13D).
Ante tal escenario, los hombres de Villafaina tratarán esta semana de recuperarse del duro golpe que supuso la derrota en Lleida para afrontar así de la mejor forma posible su duelo del sábado a las 16:30 horas contra el Reus, un equipo que también llega dolido en su orgullo después de ser goleado en casa por el Hércules (0-3). Un triunfo granota –que debido a esta lesión grave puede recurrir al mercado en busca de un futbolista libre– sería el mejor homenaje para un Manu Miquel que hoy martes se ha pronunciado en sus redes sociales con esta emotiva carta: “Perdonad que no me haya pronunciado aún, es un momento muy difícil para mí y mi familia. No quería adelantarme a lo que parecía más que previsible. Decíos que se ha confirmado LO PEOR, una lesión que me tendrá apartado de los campos de fútbol. Tengo el ligamento cruzado roto, meniscos y el lateral externo jodido. Decíos también, dos días después de sentir cómo un chasquido gigante envolvía mi rodilla haciéndome gritar de dolor y viendo cómo el mundo se caía encima de mí, que hoy empieza el gran reto de mi vida, mi primer bache como futbolista que he de superar. Superarlo por demostrarle a mi familia, a los que en los momentos difíciles están conmigo, que voy a ser capaz de salir ileso de este mal trago, que voy a trabajar día a día por volver aún más fuerte y que nadie se interpondrá en mi sueño. Decidle a mis compañeros que me van a seguir teniendo aquí para TODO lo que necesiten y que me siento orgulloso de poder estar junto a vosotros en un vestuario como éste. Por supuesto incluyo a mis compañeros del Albacete, que para mí son muy importantes y que tengo claro que los resultados van a llegar y van a conseguir el premio que tanto se merecen. Voy a intentar aportar lo máximo desde fuero. Que sepáis que mis dos equipos (Albacete y Atlético Levante) van a salir adelante y vais a demostrar todo el potencial que tenéis. Por último, decíos que estoy bien, que me siento fuerte y que no os preocupéis por mí; y a mis compañeros de profesión decir que aprovechéis cada día, cada entrenamiento como si fuera el último de vuestras vidas.”.
